El cantante cristiano Thalles Roberto repasó su propia vida, contando detalles de su infancia, su conversión y su carrera, en una entrevista con JesusCopy.
Actualmente, Thalles es pastor y líder de adoración en la Iglesia Lakewood, en Houston, Texas, donde vive junto a su esposa Daniela Campos y sus dos hijos.
En medio de la charla con Douglas Gonçalves, el cantante destacó la importancia de la vida anónima.
«El otro día, Dios me dijo algo muy importante. Ningún ser humano ha nacido para recibir alabanzas o ser idolatrado. Hemos nacido para alabar a Dios», dijo. Y señaló que para «matar» a una persona, lo único que hay que hacer es alabarla y adorarla.
Mientras hablaba de su vida sencilla, mencionó que él y sus hermanos solían comer alimentos caducados del supermercado. «He comido helado de la basura. Y salí de este lugar, de la humilde casa de mi padre, con menos de dos años de converso, para ser el artista más relevante del país», declaró.
«Nadie nace preparado para salir del barro y subirse a un avión privado. Nadie, hombre… Yo tenía mi propio piloto, ganaba millones al mes haciendo cinco programas al día», agregó.
El cantautor brasileño dice que vivió un periodo de gran presión y que después de «salir del camino» se tomó dos años para ver sus propios vídeos. Reconoció que necesitaba ser tratado de nuevo por Dios.
«Fue hermoso vivir esto, estar en silencio y ser ministrado por el Espíritu Santo», expresó.
Asimismo, Talles habló concretamente de lo ocurrido desde 2015 hasta la actualidad. «La gente me pregunta por qué dije ciertas cosas en aquel entonces que no debían decirse», dijo.
«¿Qué pasa si arrancas un cactus del desierto y lo replantas donde tiene mucha agua? No puede soportarlo. Así que el hombre natural que llevo dentro necesitaba sacrificar el fenómeno», dijo utilizando una ilustración para hablar de su conducta.
Para el cantante, el «suicidio ministerial» cometido fue el motivo del rescate de su propia salvación.
«Lo que cometí en ese momento salvó mi matrimonio, mis hijos y la relación con los pastores que creyeron en mí», señaló.
Ahora Talles resume su historia como una oportunidad para volver a vivir con Dios.
Y cantó un pedazo de una nueva canción para mostrar cómo debemos influir en los demás a nuestro alrededo : «Quiero ser una carta, la carta viva de Dios para el mundo. Que los hombres lean y se enamoren de Ti. Escribe esa carta a tu manera, borra mis borradores, acepto. Tu proceso quiero llegar a ser, la carta viva de Dios».
Según el cantante, cuando pensaba que era el final, Dios escribió una nueva página para continuar su historia. «Escribo tu vida a mi manera, rompo tus borradores y defectos. Eres un proyecto mío, una carta viva de Dios. Tú eras la muerte, yo soy la vida. Tú eres el papel y yo la tinta», concluyó.
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