En África, un equipo de médicos misioneros expertos en cirugías ortopédicas cuenta cómo en medio de su labor hacia los necesitados, la presencia de Dios no los ha dejado.
Samaritan’s Purse envió a Burundi, África, una comisión de médicos que brindarán asistencia en esta área a las personas que más lo necesiten, por ejemplo un niño que viajó tres horas hasta el hospital donde ellos estarían para ser evaluados.
Su condición era muy grave
Amié Fleury, hijo del pastor Michel Ntamubano nació con la condición “Blount” que deforma una o ambas rodillas haciéndolas curvas de lado a lado, los médicos lo habían diagnosticado como el caso más grave y por eso su padre había estado orando a Dios por la intervención quirúrgica.
«Me relajé un poco cuando me di cuenta de que no tenía otra opción que dejar de trabajar a través de nuestras manos débiles para ser una respuesta a las oraciones de tantos fieles», dijo el doctor encargado de la cirugía.
Dos doctores trabajaron arduamente en la intervención de Amié, tanto el Dr. Galat como el Dr. Ted John lograron enderezar las piernas del niño, su pos operatorio exigió que estuviera enyesado durante varios meses.
«Pudimos sentir la presencia de Dios en la cirugía»
«Hay momentos en la sala de cirugía que podemos sentir la presencia de Dios con nosotros, y ese fue uno de esos momentos», dijo Galat.
«Fijar las piernas torcidas de Amié exigió múltiples cortes en varios planos para realinear y luego estabilizar los huesos con hilos a través de la piel – todo ello sin el beneficio de cualquier imagen intraoperatoria. Pero después de terminar el caso, me sorprendió gratamente la apariencia normal de las piernas”, dijeron los médicos a la institución.
“Ted John y yo golpeamos los puños mientras todos en la sala sentían que estábamos en suelo sagrado. Hicimos una oración para la curación y protección para Amie y lo llevó de vuelta a su padre», agregaron.
«Ángeles de Dios trajeron su sanidad»
Ntamubano dice que fueron ángeles de Dios trayendo la sanidad de su hijo, «Hubo gran alegría en toda mi familia y en la iglesia también», expresó.
Fleury fue uno de los primeros 28 pacientes que fue beneficiado con estas cirugías hechas por médicos cristianos.
Fuente: bibliatodo.com
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