Oficial comunista se convierte a cristo luego de pasar varios dias espiando a un cristiano.
La madre de Kim comenzó a enseñarla a memorizar los versículos de la Biblia. Su padre explicó el Evangelio y el plan de salvación completo para ella, y su abuelo le enseñó a orar.
“Es sólo hablar con Dios, nada más, nada menos que eso”, le habló:
“Para mí, todas esas historias e ideas eran tan interesantes”, dijo Kim. “Yo también pasé a leer la Biblia sola, pero me di cuenta de cuánto era peligroso en mi país, mi padre siempre enfatizaba no compartir nada con nadie, entonces él empezaba a orar en susurros, de manera casi inaudible, diciendo: ‘Padre, ayude el pueblo norcoreano a buscar su reino en primer lugar “.
A veces, el padre de Kim se encontraba con otras personas en un lugar secreto, donde todos oraban juntos y estudiaban la Biblia.
“Cuando un hombre estaba muriendo, mi padre fue a verlo en su lecho de muerte”, recordó Kim. “Él confesó a mi padre:” Yo sé todo sobre ti, tu familia y tu fe. Yo era un espía y pedí a las autoridades para seguirte “.
El padre de Kim quedó un tanto sorprendido con aquella revelación, pero también quedó curioso por el hecho de que aquel hombre hiciera esa revelación en su lecho de muerte y pidió verlo.
Entonces aquel hombre continuó con su declaración, explicando que fue tocado por el testimonio de vida de aquel cristiano que él espionó por tanto tiempo y ahora también quería entregar su vida a Jesús.
“Tú eres un buen hombre, nunca te denuncié a nadie, dígame cómo yo también puedo hacerme cristiano”, dijo aquel oficial en su lecho de muerte.
“En sus últimos momentos de vida, aquel hombre se arrepintió de sus pecados y entró en el Reino de Dios, mi padre consiguió ayudar a llevarlo hasta allí”, dijo ella.
Orando por Corea del Norte
Hoy Kim está casada y viviendo en Corea del Sur con su familia, pero espera un día poder volver a Corea del Norte para intentar compartir el mensaje del Evangelio con el pueblo de su tierra natal.
“Me gustaría poder volver a Corea del Norte y compartir el Evangelio con la gente allí y tener comunión con los creyentes locales”, dijo. “Yo estaría lista para morir por el Evangelio. Pienso que si yo no tuviera una familia aquí en Corea del Sur, ya volvería y ayudaría a la gente que necesitaba”.
Deja tus comentarios sobre esta noticia.
Fuente: bibliatodo.com
No hay comentarios :
Publicar un comentario