Incluso los profesores no les entienden y los médicos temen tocarlos. Algunas familias les niegan la interacción con otros niños o sus mismos familiares.
Por ello Every Child Minister (ECM) les comparten el valor y amor que Dios les ha dado, pues están hechos a su imagen y semejanza. El ministerio cristiano les ofrece accesorios necesarios para una mejor calidad de vida y también les comparten del inmenso amor que tiene Cristo para ellos.
“Por la gracia de Dios, el amor y la educación estamos ayudando a las comunidades a cambiar el modo de ver a los albinos, no como una maldición, sino como personas que pueden ser bendecidas”, explica Mark Luckey,director ejecutivo de ECM
Los niños, en particular aquellos con albinismo, están llegando a conocer a Cristo “Ahora vemos que estos niños están siendo ayudados, y nos damos cuenta de que Dios los ama”, dijo Luckey.
Fuente: impactoevangelistico.net
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