Trenton McKinley, de 13 años, viajaba en un pequeño remolque que se encontraba detrás de un carro de dunas cuando tuvo un accidente.
“Golpeé el concreto y el remolque aterrizó sobre mi cabeza. Después de eso, no recuerdo nada «, le dijo Trenton a Fox 10. El adolescente fue llevado al hospital donde los médicos contaban siete fracturas de cráneo.
Su madre, Jennifer Reindl le dijo a Fox 10. «Todo lo que vi fue una camilla con los pies colgando. Murió un total de 15 minutos. Cuando regresó, dijeron que nunca volvería a ser normal. Me dijeron que los problemas de oxidación serían tan graves para su cerebro, que sería un vegetal si lo lograba”.
“Dijeron que la próxima vez que su corazón se detuviera, tenían que dejarlo morir. Tenía la opción de firmar un papel para donar sus órganos para salvar a otros cinco niños y los doctores seguirían golpeándolo con adrenalina hasta el lunes… así que firmé para donar sus órganos», escribió Reindl en una publicación de Facebook. «Sus ojos eran sólidos, negros y secos, y sabía que él no dudaría en salvar 5 vidas más».
El día de su milagro estaba preparado
Un día antes de que sus médicos terminaran de mantenerlo con vida, ocurrió un milagro. Trenton comenzó a mostrar signos de actividad cerebral.
“Al día siguiente recibí una llamada. Cancelaron la prueba final de ondas cerebrales justo antes de que lo desconectaran, su mano se movió, luego sus pies”, continuó Reindl en la publicación de Facebook. «Así que miraron sus ojos y volvieron. Antes de todo, él tenía los ojos azules. Ahora son verdes con pequeñas manchas blancas como el brillo. Dicen que cuando miras a Dios…hay cambios de pigmento… y mi bebé estuvo en el cielo durante todo un día… es un milagro”.
Fox 10 informa que Trenton cree que fue al cielo.
«Estaba en un campo abierto caminando en línea recta», dijo Trenton. «No hay otra explicación más que Dios. No hay otra manera. Incluso los médicos lo dijeron.
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